Un grupo de personas, huyendo de la virtualización de la realidad, decide aislarse para formar una sociedad basada en la cosmogonía y filosofía de las grandes civilizaciones del pasado. Crean una lengua propia, encuentran un lugar virgen en la naturaleza y lo habitan. Cercan su territorio con muros construidos por ellos mismos. Aunque forman un ejército para protegerse del exterior, el mundo es tan distópico en ese momento, que termina no prestando atención al fenómeno. El Vaticano entra en una crisis grave y está a punto de desaparecer. Al paso de los años y con la inminente extinción de la humanidad, este sitio termina convirtiéndose en un pueblo no contactado.